En los arrecifes de coral del Indo-Pacífico, las aguas de algunas áreas están tan contaminadas que las serpientes del mar han cambiado de color para poder sobrevivir. Emydocephalus annulatus, serpientes con cabezas de tortuga, viven en las aguas del sudeste de Asia, Australia y Nueva Caledonia. Algunos de ellos frecuentan aguas contaminadas, cerca de centros industriales y urbanos. Investigadores franceses y australianos han descubierto que estos reptiles marinos visten un atuendo completamente negro, mientras que generalmente están rayados. También notaron que estas especies mudaban mucho más que otras.
Una adaptación para sobrevivir a la contaminación
Luego, los científicos realizaron análisis de la piel de estos animales y descubrieron que contenían una concentración mucho mayor de toxinas que las serpientes en áreas no contaminadas. Esta piel oscura permitiría a las serpientes marinas urbanas de rechazar los metales pesados ingeridos como el cobre, el plomo, el zinc u otros, siempre que mudaran. Este es el fenómeno del melanismo industrial. Este no es el primer caso observado. Ya en el siglo XIX, Biston betularia, una gran polilla con alas blancas moteadas de negro, que vivía cerca de los grandes centros industriales británicos, había sido decorada con un vestido negro. Esta transformación le permitió confundirse con la oscuridad del hollín que cubría los árboles.